Hay días en los que el desarrollo se limita al estudio. Hoy es uno de esos días.
Cuando ya dominas un lenguaje, una metodología, algoritmo o receta culinaria sueles olvidar todo el procedimiento que ha habido detrás, todas esas horas que pasaste estudiando como un loco, peleándote con conceptos ambiguos, los pequeños triunfos por entender ideas que parecían complejas y que finalmente resultaron simples.
Hoy he estado caminando entre palabras raras. Gracias apple.
Echo a faltar el hecho de que no hayan más películas de matemáticos, ingenieros, ajedrecistas e inventores.
También hecho de menos algo tal que esto:
Este tío inventó un exoesqueleto más peligroso que afeitarse con una motosierra. Lo hizo en una cueva y con el corazón enchufado a una batería.
Por las películas de Ironman, Tony Stark parece tener más conocimientos físicos que Richard Feynman, y estar muy por encima en electrónica, programación y algoritmia que E.T (un lead programmer con aspecto de ñordo galáctico). Bravo.
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